19 agosto 2006
Salvemos la Vega denuncia carteles ielgales
Salvemos la Vega denuncia que los carteles publicitarios junto a carreteras, además de prohibidos, pueden provocar accidentes y son un atentado contra la Vega
La plataforma Salvemos la Vega denuncia que las carreteras granadinas se han inundado de carteles publicitarios infligiendo con ello la normativa vigente que prohíbe dichos carteles junto a las carreteras. Esta situación supone un auténtico peligro para los automovilistas ya que los carteles se ubican en curvas, rotondas y otros lugares en los que un despiste puede ocasionar graves accidentes. Por otra parte, la ubicación de esos carteles en zonas de vega protegida por el POTAUG constituyen un atentado contra el paisaje protegido y una vulneración del espíritu y letra del POTAUG que quiere proteger espacios agrícolas de excepcional valor ambiental y productivo. Se da la circunstancia además que en muchos lugares donde se ubican los carteles suelen dejarlos sin cultivar, Como ejemplo de esta situación Salvemos la Vega pone de ejemplo la carretera que une Churriana con Granada; en un trayecto de menos de tres kilómetros hay decenas de carteles publicitarios.
La normativa estatal que prohíbe estas actuaciones aparece en el reglamento de la ley (rcl 1994/2641) en sus artículos 89 y 90. En su disposición transitoria segunda especifica que en las vallas sólo serán permitidos los CARTELES INFORMATIVOS (NUNCA LOS PUBLICITARIOS) DE ESTABLECIMIENTOS MERCANTILES E INDUSTRIALES SIEMPRE QUE ESTEN SITUADOS SOBRE LOS INMUEBLES EN QUE ESTOS ESTABLECIMIENTOS TENGAN SU SEDE O EN SU INMEDIATA PROXIMIDAD Y SEAN INDICATIVOS DE SU ACTIVIDAD. Es decir, que están prohibidos los carteles publicitarios junto a las carreteras. HAY DOS SENTENCIAS DEL SUPREMO DE 1997 MUY CLARIFICADORAS DEL TEMA.
La plataforma Salvemos la Vega va a enviar escritos denunciando esta situación a la Dirección General de Tráfico, a la delegada de la Junta de Andalucía y a la delegación de Obras Públicas de la Junta de Andalucía.
Salvemos la Vega se pregunta cómo una situación que contraviene las leyes, que aumenta la posibilidad de provocar accidentes y que atenta contra un paisaje protegido sea permitida por las administraciones local, andaluza y española. Al mismo tiempo pide que la Dirección General de Tráfico informe de cuántos accidentes, graves o no, pueden haber sido debidos a la distracción provocada en los conductores por estos carteles publicitarios ilegales.
Por último, Salvemos la Vega se pregunta; ¿Cómo es posible que una infracción tan flagrante no sea vista por los que tienen que hacer cumplir la ley, y cobran por ello, y sí por nosotros, simples ciudadanos de a pie?
